En el marco del proyecto Anifog de la Universidad de Girona, hemos publicado recientemente las fichas de buenas prácticas para la gestión forestal posterior al incendio. Estos archivos reflejan las recomendaciones para mitigar o prevenir los impactos negativos de la poda en los bosques mediterráneos. Son una guía práctica tanto para los gerentes como para los trabajadores forestales que desean conservar la biodiversidad y los servicios ecosistémicos en los bosques. El documento incluye una herramienta para seleccionar recomendaciones basadas en cuatro objetivos de administración principales en forma de diagramas de flujo. En cuanto a las recomendaciones, se abordan la regeneración de la cobertura vegetal, la reducción de la erosión, la conservación de la fertilidad del suelo, la conservación de la fauna, la reducción del riesgo de incendio posterior y la conservación de la calidad de los hábitats fluviales y de ribera. La publicación se estructura en ocho fichas divididas según los elementos del medio que pueden verse afectados por la poda de la recuperación: paisaje, cubierta vegetal, erosión del suelo, fertilidad del suelo, fauna invertebrada, fauna de vertebrados, riesgo de incendios posteriores y hábitats fluviales.